El Espejismo de los Dioses: Una Reflexión Sobre la Fe
El interrogante sobre la existencia de un Ser Supremo, y las variadas interpretaciones que emergen de esta inquietud, nos conducen a una encrucijada espiritual y filosófica. En este diálogo entre maestro y buscador, se expone con aguda lucidez la multiplicidad de dioses y libros sagrados que han guiado a la humanidad a través de las edades. Nos encontramos ante el cruce de caminos entre lo trascendental y lo terrenal, entre lo que creemos y lo que sabemos.
A continuación quiero compartir con ustedes una reflexión que nos invita a explorar el complicado conjunto de nuestras creencias y cómo discernimos lo auténtico en medio de ellas.
El Espejismo de los Dioses
- Maestro ¿usted cree en Dios?
- ¿En cuál dios?
- ¡Pues en el gran dios universal!
- Existen muchos dioses conocidos por la mente humana.
- En el dios verdadero que está en el libro sagrado.
- Existen muchos libros sagrados.
- Me refiero al libro sagrado de la religión verdadera.
- Existen muchas religiones.
- Si, pero la religión verdadera a la cual pertenezco tiene el libro sagrado verdadero donde habla del dios verdadero en el cual yo creo.
- ¡Todos los creyentes creen que su dios, su libro sagrado y su religión son los verdaderos!
- Nuestro libro sagrado inspirado por el verdadero dios dice que sino crees en él serás enviado al lugar de tormento eterno.
- Los otros dioses tienen la misma amenaza en sus libros sagrados.
- Si, pero mi dios promete un paraíso para sus fieles.
- Los otros dioses prometen lo mismo.
- ¿Pero entonces cuál es tu dios ?
- Podría escoger al azar, total todos cumplen con el mismo patrón de amenazas y promesas.
- ¿Por qué no has escogido uno entonces?
- ¡Por qué inclinarme por uno cuando es notorio que todos son el mismo dios con diferente nombre, libro sagrado y religión!
- Tus blasfemias me dicen que eres ateo.
- Por el hecho de no creer en el dios conocido que está detrás de todas las religiones en los supuestos libros sagrados, no quiere decir que sea ateo.
- ¡Si no eres ateo entonces crees en un dios!
- La mente significa palabras, y la palabra dios es creada por la mente , el dominio de los hombres mas que por las armas es por la sugestión y control mental, por eso la palabra dios crea un dios mental que controla al creyente desde su mente .
- ¿Insinúas que mi dios es un arquetipo mental?
- Estamos en un universo mental y material, aquello que le des fuerza en tu mente se manifiesta en la materia. Así como aquellos dioses que tengan a su favor tu voluntad en tu mundo mental tendrán poder sobre ti en el mundo material.
- Pero si dices que mi dios o los dioses son de carácter mental ¡entonces no existen, y al no existir tampoco tienen poder de ninguna manera sobre mí y sobre los creyentes!
- ¡Excelente reflexión, por fin nos entendemos! "Al entender que los dioses son de carácter mental, basta con saber quién o quiénes son los que dominan la mente humana, para saber cuál es el poder que está detrás de esos dioses".
En las palabras del maestro, se entreteje una trama de perspicacia y provocación. Cada afirmación, cada pregunta, nos insta a escudriñar más allá de las capas superficiales de la fe, desafiando las bases mismas de nuestras convicciones. La noción de un dios universal, el verdadero entre los múltiples, despierta una cuestión esencial: ¿Cómo discernimos lo auténtico en medio del conjunto de creencias?
En este diálogo, hallamos una invitación a la introspección, a trascender las fronteras de lo convencional y explorar los cimientos mismos de nuestra fe. Nos recuerda que, en última instancia, el poder de cualquier dios reside en la mente y el entendimiento humano. Al comprender esto, nos empoderamos para forjar nuestro propio camino espiritual, guiados por la sabiduría que mora en nuestros corazones y mentes.
Que este diálogo nos inspire a buscar la verdad con valentía y a reconocer el inmenso poder que yace en nuestra capacidad de comprender y creer. En cada pregunta, en cada reflexión, yace el potencial para un despertar espiritual y una conexión más profunda con el misterio de la existencia. Que en este viaje de la mente y el alma, encontremos la luz que nos guíe hacia una comprensión más profunda de nosotros mismos y del universo que habitamos.
"Cada alma es un peregrino en el viaje hacia la comprensión y conexión con lo divino".
Por Aleja Bama